sábado, 14 de noviembre de 2009

Hampi, ruinas de un imperio en un paisaje único.

Llegamos primeramente a Hospet después de 5 horas en tren desde Anantapur. La distancia era corta pero entre que salimos a las 3 de la mañana, junto con que dormimos en tercera sleeper class con gente que bajaba y subía del tren cada 10 minutos más gran parte del ejército de la India durmiendo con los fusiles en sus literas, digamos que no dormimos mucho.

Tras coger un rickshaw en la estación de tren, llegamos a Hampi que se encuentra a unos 13 km y más concretamente a Viru , un pueblecito que está al otro lado del rio con mucho más encanto, para buscar alojamiento. La única posibilidad para cruzar el rio es una barquita que va y viene constantemente entre las 7 de la mañana y las 6 de la tarde. Una vez encontramos un alojamiento, nos instalamos en nuestra cabañita, muy chula y con una hamaca en el porche delante de unos arrozales; nos costó 450Rs (6 €) de lo más caro que se encuentra por aquí, pero sus vistas nos conquistaron.


Entre que decidíamos si salir a ver cosas o dormir un rato, el tiempo nos ayudó con la decisión, ya que empezó a llover a cántaros, así que nos fuimos a dormir. Estuvo lloviendo durante todo el día, con lo que no nos quedó más remedio que “disfrutar” de nuestra cabañita y hay que reconocer que nos vino fenomenal para descansar!

Al día siguiente decidimos que lloviera o no, íbamos a cruzar de nuevo el rio y visitaríamos Hampi ya que por lo que nos habían contado es muy interesante y no nos lo queríamos perder. Por suerte, aunque estuvo amenazando todo el día el tiempo nos dio una tregua y nos dejo hacer la visita tranquilamente, sin el calor sofocante que debe hacer aquí normalmente.

Hampi , antiguamente Vijayanagar, fue una de las ciudades más poderosas de su tiempo y capital de un Imperio desde el siglo XIV hasta el XVI, cuando fue conquistada por los musulmanes y la destrozaron casi por completo. En una superficie de aproximadamente 20 km cuadrados, se encuentran restos de templos, monolitos, bazares y ciudadelas, algunos de ellos muy bien conservados como el templo de Vitthala (conocido por el carro de piedra que alberga), el Lotus Mahal o los establos de los elefantes. También hay figuras gigantes hechas de una sola piedra como la de Gnesha y la de Narasimha.















Lo más espectacular no son ya los monumentos que se ven sino el paisaje en el que están situados, ya que está rodeado de montañitas llenas de rocas gigantes sueltas, con todo tipo de formas y muchas veces en equilibrio unas con otras. Además está el rio, también rodeado de este tipo de rocas y de fondo palmeras y plataneras dándole un aire tropical. El conjunto en si es muy relajante y muy atractivo a la vista.


Nos habíamos encontrado mucha gente que ha venido repetidamente a Hampi o que cuando viene se queda mucho más de lo previsto. Lo cierto es que es comprensible porque tiene un aire muy chill out y múltiples opciones para pasear, ir en bici o relajarse en una de las terracitas de los múltiples restaurantes de Hampi y Viru.

2 comentarios:

  1. No se como os las ingeniais que siempre encontrais alojamientos con encanto.Estamos especialmente contentos despues de la llamadita,pues se os nota muy alegres y creo que tambien estais aprovechando el tiempo, pues vais a saber mas que Bill Gates.Seguir cuidadoos mucho.Besos .(faltan 6 dias....)Ara &Luis

    ResponderEliminar
  2. Hemos llegado de Turquia, muy contentos, pero un poco cansados, por lo que unos dias de playa en Goa nos vendrian muy bien. Nos estamos poniendo al dia con la India, las fotos preciosas, el vieje envidiable. Cuidaros. Un abrazo Pili y Paco.

    "Señora" ¿Que tal las reformas? Me imagino que de los nervios, pero el resultado espectacular.
    (Estamos deseando verlas).

    ResponderEliminar