domingo, 11 de octubre de 2009

Por el Desierto del Thar: camellos, dunas y escarabajos

Desde Jaisalmer nos hemos ido a un pueblo que se llama Khouri, a sólo 50 km de Pakistán; de hecho, la carretera se encuentra con militares un poquillo más adelante y te ponen infinitas trabas para evitar que pases al otro país.

Khouri tiene una atracción principal, que son las rutas en camello en plan excursión por las dunas del desierto del Thar, un desierto extremadamente árido y donde el día a día es muy duro: a modo de ejemplo, muchas casas por no decir todas, carecen de agua y las personas que viven deben andar cientos de metros y algún que otro kilómetro hasta pozos naturales para conseguirla y llevarla a sus casas en cuencos en la cabeza.

La experiencia del camello es bastante divertida, aunque a nuestros traseros no creo que les apetezca volver a repetirla en al menos unos cuantos meses, porque han acabado bastante doloridos. La excursión consiste en llevarte durante 3 horas de un lado a otro enseñándote la fauna autóctona (hemos podido ver antílopes), las casas de la gente, los pozos naturales y el entorno en general. Al final, terminas en una duna viendo la puesta de sol, con otros grupos de gente que también han ido en camello, siendo éste uno de los momentos en los que piensas: “qué tranquilidad se respira y qué espectáculo tan relajante… si tuviera una cervecita a mano“. Para nuestra sorpresa, aparece de la nada un chaval con bebida y tras regatear con él por una cerveza de 660 ml (tiene pequeñas pero pujamos por la Kingfisher que es la más grande) nos quedamos otra media hora con la cerveza y pensamos: “ahora sí… esto es vida!!”

Después de la puesta de sol, volvemos en camello a un resort donde nos tienen preparada una cena y un baile con un grupo folclórico local (Marisol bailó un poco con una de las bailarinas). En el tiempo que estamos ahí conocimos a una pareja española, otra alemana y unas chicas irlandesas que viajaban solas, todos ellos super majetes.

A continuación, nos dan la posibilidad de dormir en el resort o volver en camello al desierto para dormir sobre una duna. Nosotros obviamente no lo dudamos: A la duna!! Nos cuesta como media hora en camello llegar, tras lo cual nuestros culetes están al rojo vivo (literal). Te plantan un colchón y unas sábanas en la duna, y te recuestas viendo las estrellas; la verdad que esa primera hora – hora y media, estás anonadado, y te das cuenta que pocas veces en tu vida vas a dormir en el desierto en esas condiciones… tras lo que te quedas frito. Pero a las 4-5 horas, hablo de las 2-3 de la mañana, te das cuenta que no estás sólo y que lo que parecía una rascada en la espalda de tu mujer, no es sino un escarabajo de los de la película de la Momia que está practicando trekking en tu espalda, y que parece estar haciendo señales a sus colegas en la arena (2 o tres más por ahí rondando) para que vengan por ese camino …. Arghhhh!!!!! El salto que doy es de Oro olímpico y me lo quito de un plumazo.


Tras este pequeño susto, me tapo con una manta que nos habían dado ya que hasta ese momento me había puesto sólo una sábana, y me la cierro a cal y canto como puedo (no se me vuelven a meter bichos, pero acabo durmiendo con un ojo abierto y otro cerrado). Marisol es bastante más lista y utiliza el saco sábana que nos compramos en Zaragoza, con lo cual duerme bastante bien, aunque también se percata de los escarabajos porque hacen un ruido bastante peculiar en la arena y pasan varias veces a lo largo de la noche cerca de nuestras cabezas.

Nos despertamos bastante pronto, con las sábanas empapadas en agua, por el efecto de la condensación que ocurre en el desierto y un poco de fresquillo. Vemos la salida del sol aunque para nuestra sorpresa está algo nublado; aún así la vista que tienes es preciosa y merece la pena verse.

Bueno, es tiempo de volver y continuar nuestro camino… la vuelta como no en camello, y nuestros glúteos odiándonos para el resto de la semana. La experiencia es sensacional por no decir irrepetible y por supuesto la volveríamos a hacer!! (con un saco - sábana y unos cojines en el culete mejor que mejor jejeje)

4 comentarios:

  1. Traeme un escarabajo de esos...madre que majos!!! Abrazo a los dos, campeones!!

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  2. Lulo, ¿¿¿¿Y tú dónde vas sin saco-sábana????
    ¡¡¡¡ Si es que "paizes" de Zaragoza ...¡¡¡¡
    ¿¿¿De dónde lo has sacado a este, Marisol ????

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  3. ¡¡¡Con lo que hemos cuidado esos culetes de p
    equeños, y nos los vais a estropear¡¡¡
    ¿No teneis repelente de insectos?en ese maravilloso botiquin de guerra?
    ¡¡¡¡Cuidaros¡¡¡¡¡

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  4. ¡¡Quiero un viaje como este¡¡
    ¡podriais dedicaros a organizar ¨Aventuras¨¡Os sigo desde el 1º dia.
    Chao

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