lunes, 11 de enero de 2010

Singapore, perla del sureste asiático

SINGAPORE es un estado reciente con unos 200 años de historia aunque esa juventud no quita para que sea una de las perlas del sureste asiático: tiene una estabilidad política que para sí ya quisieran muchos estados; es un ejemplo de convivencia entre culturas asiáticas y occidentales; combina tradición y modernidad, edificios y centros vanguardistas de pantallas gigantescas, frente a edificios coloniales o parques super cuidados donde la gente va a hacer jogging o a pasar el día con la familia; sus calles están inmaculadas, limpias como la patena (la multa es de unos 500 € por papelito que tiras); los transportes y las infraestructuras son de primera línea, el sistema sanitario es muy bueno, etc.


No es de extrañar que grandes multinacionales hayan asentado sus cuarteles generales para toda la zona de Asia en Singapore y que por ello, haya cantidad de occidentales (en inglés expats) que se hayan venido y se encuentren como en casa. De hecho, uno de los días estuvimos en casa de Ana Sol y Xavi (Ana Sol es la hermana de nuestro amigo Juanjo y su marido Xavi es un ejecutivo de una empresa española) y disfrutamos de una velada muy entretenida, en la que nos contaron sus vivencias por Singapore y Asia.

Al igual que Hong Kong y Bangkok, era la segunda vez que veníamos y para nosotros era indispensable una visita al Hotel Raffels, uno de los más elegantes del mundo, de estilo colonial y donde se alojaron antaño actores y actrices de Hollywood (de hecho, muchas habitaciones llevan sus nombres). Abarca una manzana entera, y rodeándolo se encuentran tiendas de marcas prestigiosas. Si uno viene aquí, ha de tomarse un SIngapore Sling, un cocktail que combina unos diez ingredientes, algo dulzón pero muy bueno.


Pero Singapore es sobre todo una ciudad para hacérsela andando. Y para andar, sin duda la zona de Orchard Road, una calle de aproximadamente 1,5 km, la más entretenida, ya que concentra centros comerciales inmensos, que compiten entre ellos para ver cuál es el más espectacular. Muchos de ellos con fachadas que cambian continuamente de color, pantallas gigantes y diseños ultra modernos.


Otra zona digna de mención y por supuesto visita, es la zona de los Quay (al lado del río de Singapore), donde uno puede coger un bote turístico para dar una vuelta o tomar algo en alguno de los cientos de restaurantes y pubs que hay de la zona. Resulta muy chulo el contraste de las casitas que hay al borde del río con los tremendos rascacielos que las bordean. Para llegar a esta zona, es muy bonito el paseo que hay desde aquí hasta el hotel Raffles (menos de 10 minutos, con cantidad de edificios coloniales).


Al final de los Quay se encuentra uno de los símbolos de Singapore, que es una fuente – estatua, que es mitad León y mitad pez.


Muy típicos en Singapore son los barrios de Little India, Chinatown y Little Arabia, tremendamente animados por la noche y que cuentan con muchos hostels para viajeros como nosotros. Decidimos quedarnos en Little India porque estaba bastante bien situada y teníamos a un paso casi todas las atracciones de Singapore (además el hostel en el que estuvimos era bastante animadete, con conciertos por las noches). Como no habíamos tenido suficiente en la India, descubrimos un restaurante indio que hacía un Chicken tikka y unos naan (como pan pizza) de queso de chuparse los dedos, con lo que nos dejamos caer por ahí más de una noche.


Una de las noches coincidimos con otra pareja de españoles( Nacho y Sergio) que también estaban dando la vuelta al mundo y acabamos contándonos anécdotas y experiencias unos a otros … esperamos veros pronto de nuevo chicos!!


Nosotros definiríamos Singapore como una ciudad muy agradable a los sentidos, sobre todo cómoda de visitar, algo carilla (se respira dinero vayas por donde vayas), con mucho calor (ahora en Enero que es cuando refresca hace casi 30 grados hasta por la noche) . Un sitio genial para pasar 2-3 días entre conexiones de aviones aunque sin el exotismo de otras grandes ciudades Asiáticas.

4 comentarios:

  1. Jajaja...Ara, nos pegó una fiebre consumista, que ríete tú de las rebajas! Y eso que solo entramos en unos grandes almacenes. Nos llegan a dejar un par de días sueltos y nos arruinamos...

    Un beso chicos!!!

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  2. Hola Marisol y Lulo:
    Casualmente hemos dado con vuestro blog y nos hemos alegrado mucho, ya que cuando lo estabais planeando nos pedísteis información .
    Ahora mismo os enlazamos en el apartado de Gente Viajera dedicado a trotamundos.
    Vemos que ya vais muy adelantados. Os deseamos lo mejor en vuestra aventura.
    Un abrazo, Asun y Ricardo

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  3. ¡No digas mas!!!
    Ya me veo en uno de esos almacenes ,o mercadillos ,o lo que sea.....guauuuu
    Revolviendo, mirando toqueteando...ufff ,solo de pensarlo ......
    Yo me identifico con "La de Bringas". Cualquier cinta , cachibache, zarrrio en general, me hace soñar con las multiples aplicaciones que le voy a dar.
    Gracias por tu recuerdo Merche
    Besos a todos.
    Ara

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  4. Bueno, bueno, de hecho recuerdo esa tarde con ataques de taquicardia y eso que entramos en un solo almacén bastante normalito (el equivalente a un C&A de aquí) Yo creo que nos contagiamos los unos a los otros, Marisol, cogía una camiseta, pues yo otra...y así

    Bueno, estos chicos han encontrado el paraíso, porque si no de qué que no nos dediquen unas letrillas...qué envidia! QUÉ ENVIDIA!!!!

    Bueno amiguitos, besitos!!!

    Merche

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